Si tu bebé o niño sufre de eccema, sabes lo incómodo y molesto que puede ser para ellos. El eccema es una afección de la piel que causa picazón, enrojecimiento y sequedad. Afortunadamente, existen tratamientos que pueden ayudar a aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de tu pequeño. En este artículo, te compartiré algunas recomendaciones para el alivio del eccema en bebés y niños.
Medidas de cuidado diario
Baño diario con limpiador suave y agua tibia
El primer paso para el cuidado diario del eccema en bebés y niños es asegurarse de que se bañen todos los días. Sin embargo, es importante utilizar un limpiador suave y agua tibia en lugar de agua caliente, ya que el agua caliente puede resecar aún más la piel. Evita los jabones fuertes y opta por un limpiador suave y sin fragancia.
Humectación diaria con ungüento o crema sin fragancia
Después del baño, es crucial humectar la piel de tu bebé o niño para ayudar a retener la humedad. Utiliza un ungüento o crema sin fragancia, como vaselina, que sea hipoalergénica y adecuada para pieles sensibles. Aplica la crema o ungüento en todo el cuerpo, prestando especial atención a las áreas afectadas por el eccema.
Evitar agentes irritantes como telas que pican y jabones fuertes
Es importante evitar cualquier cosa que pueda irritar la piel de tu bebé o niño. Esto incluye telas que pican, como lana o tejidos sintéticos, así como jabones fuertes y perfumados. Opta por telas suaves y transpirables, como el algodón, y utiliza detergentes suaves y sin fragancia para lavar la ropa de tu pequeño.
Mantener las uñas cortas o poner guantes de algodón
El eccema puede causar picazón intensa, lo que puede llevar a que tu bebé o niño se rasque y lastime la piel. Para evitar esto, mantén las uñas de tu pequeño cortas y limadas. Si tu bebé es muy activo y no puedes mantener sus uñas cortas, considera ponerle guantes de algodón para evitar que se rasque y empeore el eccema.
Tratamientos adicionales
Consultar al médico sobre la aplicación de ungüentos o cremas medicinales
Si las medidas de cuidado diario no son suficientes para controlar el eccema de tu bebé o niño, es importante consultar al médico. El médico puede recomendar la aplicación de ungüentos o cremas medicinales que contengan corticosteroides para reducir la inflamación y aliviar la picazón. Estos medicamentos deben ser recetados y utilizados bajo la supervisión de un profesional de la salud.
Administración de medicamentos y baños de lejía
En casos más graves de eccema, el médico puede recomendar la administración de medicamentos orales o tópicos para controlar los síntomas. Además, en algunos casos, se pueden recomendar baños de lejía diluida para ayudar a reducir la bacteria en la piel y prevenir infecciones secundarias. Sin embargo, es importante seguir las indicaciones del pediatra y no utilizar estos tratamientos sin su supervisión.
Recuerda que cada caso de eccema es único y lo que funciona para un niño puede no funcionar para otro. Siempre es importante consultar al médico para obtener un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento personalizado. Con el cuidado adecuado y los tratamientos recomendados, puedes ayudar a aliviar el eccema en tu bebé o niño y mejorar su calidad de vida.